VISIÓN PEDAGÓGICA

Desde Enrosca queremos ofrecer una visión del juego que favorezca un crecimiento saludable y feliz. Nuestra misión es crear materiales y espacios en los que la curiosidad, el descubrimiento, el error, la pausa, el silencio, la sorpresa, la escucha…permitan el autoconocimiento, la expresión y el desarrollo pleno de cada una de las personas que participan al juego, sean peques o grandes.

Entendemos que jugar es prestar atención al presente, no es una preparación para nada y no tiene un propósito ulterior. Este juego surge de manera espontánea, sin estereotipos, sin ser dirigido ni interferido por las personas adultas que facilitan un espacio seguro y sin prisas, y que sólo acompañan y supervisan. Es un juego sin género ni rol específico, en el que las criaturas deciden cuando empieza el juego, cuando acaba, y como y con qué jugar, asimilando así su entorno y sus vivencias, interiorizándolas.

El juego, en el proceso de desarrollo de un ser humano, nos propone enfrentar situaciones que nos invitan a decidir. Una vez tomada una decisión, cualquiera que sea el resultado, ésta genera bienestar y la sensación agradable de haber compartido una experiencia, que deja la memoria de aquello realizado, y a la cual acudiremos para enfrentar nuevas situaciones.

Este juego, que nace del movimiento, se convertirá después en pensamientos. Así pues podemos decir que jugar es nuestra primera forma de pensar. Cuanto más jugamos, más desarrollamos todas nuestras capacidades y habilidades, y favorecemos pensamientos más creativos, cooperativos, amables, inclusivos, resilientes, conscientes, …

En Enrosca jugamos y pensamos en cómo ayudar a ser y crecer felices, mediante propuestas de juego creadas con materiales naturales, sostenibles y de proximidad.